No más cortes de luz en los barrios obreros. Barrios olvidados

El pasado viernes 22 de Marzo tuvo lugar una manifestación contra los cortes de luz que sufre las familias en la zona norte de Granada. A continuación os dejamos el vídeo de la movilización y una reflexión de los compañeros del portal rebeldemule sobre la manifestación contra los cortes de luz en los barrios obreros de la zona norte de la ciudad de Granada.

Mucho se ha hablado de que el sabotaje en Venezuela a una central eléctrica ha dejado sin suministro a la población. Poco de que lo mismo viene sucediendo en las barriadas de Zona Norte de Granada, ciudad de la turbocapitalista España.

Lo que empezó siendo una medida excepcional de la trasnacional Endesa hace unos años, aplicada de manera irregular, se ha intensificado. Este invierno ha sido frecuente no disponer de más de dos horas diarias de luz. En los colegios, niños y docentes no han conocido los beneficios de la calefacción en un territorio especialmente frío. Los frigoríficos han pasado a hacer las veces de estante de cocina. El impacto en las personas mayores y dependientes está siendo demoledor. Los centros de salud viven en alerta sanitaria permanente. Como en «Captain Fantastic», la vida ha retrocedido al Neolítico, aunque no por propia voluntad.

Endesa, que espera incrementar en 6.300 millones de euros sus beneficios hasta 2021, suministra estos generosos cortes como contramedida a la proliferación de empalmes ilegales a la red eléctrica, triquiñuela de las mafias que de este modo abastacen a los huertos urbanos clandestinos en los que cultivan marihuana. Efectivamente, es esta una alternativa económica realista para 26.000 proletarios desarmados por una tasa de desempleo del 67%, de la cuál el 80% es de larga duración, un analfabetismo del 10 % y el golpe de que un 50% de sus hijos dejen los estudios tras la secundaria, según informa el compañero Mario Picazo, párroco de nuestra Señora de la Paz. Pero eso no se combate programando el desabastecimiento, sino con organizaciones independientes de clase, planes de empleo y bienestar social. Zona Norte es el laboratorio a escala de lo que el anarcocapitalismo aspira universalizar: un territorio devastado, desesperanzado, donde el imperio de la ley dependa del capricho empresarial, nuevo monarca absolutista, y no conozca rival.

 

Cuando vuelva la luz a Venezuela, por Isaac Rosa

CUANDO VUELVA LA LUZ A VENEZUELA

Cuando vuelva la luz a Venezuela veremos y quizás sabremos si el apagón de estos días es la última muestra de ineficacia y abandono en un país devastado económica y socialmente, o si ha sido un sabotaje a gran escala (hipótesis nada magufa: hace años que las potencias militares son capaces de colapsar las infraestructuras básicas de un país sin lanzar un solo misil).

Cuba atribuye el apagón en Venezuela a un "sabotaje" y "acto terrorista" de EE.UU.

Cuando vuelva la luz a Venezuela veremos y quizás sabremos todo lo sucedido en estos últimos meses, y que ahora no vemos. A veces se te acostumbran las pupilas a la oscuridad y acabas viendo algo, como el camión ese que ardió con ayuda humanitaria en la frontera colombiana. Los grandes medios han necesitado dos semanas para ver lo que algunos ya vieron (y denunciaron) el mismo día: que el fuego no vino del lado venezolano, sino de quienes acompañaban tan humanitarios camiones con cócteles molotov. La acusación a las autoridades venezolanas ocupó portadas y telediarios de medio planeta, pero el desmentido queda para páginas interiores, típico efecto secundario de la falta de visión en un apagón.

Cuando vuelva la luz a Venezuela veremos todo aquello que ahora no vemos, como ya pasó en otros países invadidos, atacados o desestabilizados. Volvió la luz y no aparecieron las armas de destrucción masiva, ni las catástrofes humanitarias, ni los crímenes contra la humanidad ni los terroristas, y a cambio la luz mostró países devastados, daños «colaterales», sociedades condenadas a retroceder décadas, gobiernos títeres y recursos saqueados.

Toda guerra, injerencia, golpe de Estado o revolución de colores va precedida de un apagón. O de varios apagones: el informativo es el primero, aunque de una vez para otra se nos olvida la vieja máxima de que «la verdad es la primera víctima de la guerra», que no es una frase de taza de desayuno sino una obviedad confirmada en cada conflicto. El apagón informativo no implica oscuridad sino todo lo contrario: mucha luz, tanta que deslumbra, ciega, quema. En el caso de Venezuela, dos décadas bajo una potente linterna y una lente de aumento, a menudo deformante.

Junto al apagón informativo, toda injerencia «humanitaria» va acompañada de un apagón legal: saltan los fusibles de la legalidad internacional, mandan los hechos consumados, que sientan precedentes y facilitan futuros quebrantos de la misma legalidad. En el caso venezolano, la descarada injerencia, evidente en el inédito episodio de los camiones (con dos países, Colombia y Brasil, facilitando una violación de fronteras), abre nuevos caminos para futuras injerencias.

No solo se apagan la información y la legalidad: también, por desgracia, nuestro juicio crítico sufre un apagón. No vemos, y a menudo no queremos ver. Un apagón que tiene mucho de amnesia: impresiona cómo en cada nuevo conflicto se nos olvida lo sucedido en anteriores conflictos, la intoxicación informativa que nos tragamos, la decepción al descubrir la verdad cuando ya era tarde. Otra vez nos desentendemos, nos conformamos con el tuit simplificador y las profecías autocumplidas, aceptamos reglas de juego con trampa y debates dirigidos.

Yo reconozco que no sé apenas qué pasa en Venezuela. Pero sí sé lo que pasó en Irak, Afganistán, Yugoslavia, Siria, Libia y tantos otros países. No soy indiferente al sufrimiento cierto del pueblo venezolano ni a su deterioro democrático, como no lo era con todos aquellos pueblos que no mejoraron sus vidas ni ganaron democracia tras ser invadidos, bombardeados o desintegrados, perdiendo a cambio la soberanía. ¿Nos volverá a pasar ahora? ¿Nos sorprenderemos e indignaremos una vez más cuando vuelva la luz? ¿No aprendemos?

Noticia publicada en eldiario.es

Próxima Merienda del Zaidín

Lo que no te cuentan de la enseñanza concertada

A través de esta merienda reflexionaremos con Pilar Mesa, profesora de enseñanza secundaria en un instituto público y delegada del sindicato CGT, sobre el origen y la situación actual de la enseñanza concertada.

Se mostrará como la política de la Junta de Andalucía no ha dejado de favorecerla con la consiguiente transferencia de recursos públicos a empresas privadas.

Además dialogaremos sobre el funcionamiento de los centros concertados y el papel que juegan en el entramado económico.

Las meriendas del Zaidín son un espacio para compartir y aprender. Reflexiona con nosotros sobre al escuela concertada frente a la pública. ☕️El café y el té corren de nuestra cuenta.? ¡También habrá dulces!?

Nos vemos el sábado 30 de marzo a las 18:00 en el Local de la Ribera (Calle Santa Rosalía, 18, Zaidín)
? Línea 4, U3
? Parada Estadio Los Cármenes

Y si no puedes venir en esta ocasión, síguenos la pista ??️‍♀️??️‍♂️, ¡en los próximos meses vamos a organizar más meriendas!

Venezuela se respeta

POR LA PAZ, LA INDEPENDENCIA Y LA SOBERANÍA NACIONAL

¡NO A INTERVENCIÓN!

¡VENEZUELA SE RESPETA!

 

Frente a la autoproclamación de Juan Guaidó, Nicolás Maduro fue elegido por sufragio universal. El 20 de mayo de 2018 la coalición electroal encabezada por Nicolás Maduro gana las elecciones con más de 6 millones de votos.

Resulatado de las elecciones de Mayo de 2018

Observadores internacionales

Frente a estos resultados no hay ninguna impugnanción de los mismos, ninguna denuncia de fraude frente a ninguna institución electoral, judicial o política.

150 observadores internacionales, 14 comisiones electorales de 8 paises, 18 periodistas extranjeros, el Consejo Latinoamericano de Expertos Electorales, delegagos de la Comisión Electoral Rusa, Common Frontiers e incluso ex-jefes de gobierno como Rafael Correa o José Luis Rodríguez Zapatero, avalan la limpieza del proceso en el que concurrieron otros candidatos.

Nicolás Maduro obtuvo el 31,7{adc1a718f5b3fba683992c834cc0c3d465e84b8e6776cb24795aa5a307525351} de los votos. Este porcentaje contrasta con el de otros mandatarios como Theresa May (29,1{adc1a718f5b3fba683992c834cc0c3d465e84b8e6776cb24795aa5a307525351}), Donald Trump (27,3{adc1a718f5b3fba683992c834cc0c3d465e84b8e6776cb24795aa5a307525351}), Mauricio Macri (26,8{adc1a718f5b3fba683992c834cc0c3d465e84b8e6776cb24795aa5a307525351}), Pedro Sánchez (15,02{adc1a718f5b3fba683992c834cc0c3d465e84b8e6776cb24795aa5a307525351}) y Enmanuel Macron (11,69{adc1a718f5b3fba683992c834cc0c3d465e84b8e6776cb24795aa5a307525351}).

Frente a este panorama, se ha desarrollado una campaña de boicot para no reconocer la legitimidad de Nicolás Maduro y su gobierno.

Pero ni la ONU, ni la Unión Europea, ni la Organización de Estados Americanos, como instituciones internacionales han reconocido al autoproclamado Guaidó.

Campaña ideológica

Campaña mediática contra Venezuela

Los grandes medios de comunicación intentan crear un estado de opinión favorable a un golpe de estado, a través de la publicación de noticias falsas y desenfocadas sobre Venezuela.

Esta campaña de desprestigio del gobierno venezolano está liderada por EE.UU. A la que también se suman países como Colombia, Chile, México, Alemania y España, entre otros muchos.

Las agencias internacionales Reuters, Associated Press y Agence France-Presee se han convertido en las principales agencias productoras de noticias falsas sobre Venezuela.

Sabemos más de Venezuela que de las condiciones de vida de nuestros vecinos. Los grandes medios de comunicación internacionales, que ni son imparciales ni neutrales. Están en el bando golpista.

Sólo el periódico El País mencionó negativamente a Venezuela en 249 de las 365 ediciones del 2017.

El lema “no hay libertad de expresión” es una constante. Vale recordar que el 80{adc1a718f5b3fba683992c834cc0c3d465e84b8e6776cb24795aa5a307525351} de medios de comunicación de Venezuela son privados, la mayoría pertenecen o están vinculados a la oposición de derecha y emiten su propaganda con absoluta libertad. Las agencias internacionales operan en Venezuela sin ningun impedimento ni limitación.

Esta campaña ideolgógica favorable a un GOLPE DE ESTADO y una INTERVENCIÓN MILITAR, se ha ido fraguando junto a un acoso económico interno sufrido dentro del país, protagonizado por estos actores que aspiran a controlar los grandes recursos naturales de Venezuela, sin importarles el sufrimiento que pueda ocasionar conseguir tales fines.

¡No es la democracia, es el petróleo!

Venezuela es la nación con las mayores reservas de petróleo del mundo. Cuenta con del 18{adc1a718f5b3fba683992c834cc0c3d465e84b8e6776cb24795aa5a307525351} del total de reservas de petróleo globales probadas. Venezuela es la octava potencia mundial en reservas de gas natural.

 

Es el segundo país con mayor reserva de oro.

Es el quinto país en reservas de hierro.

Cuenta con con importantes reservas de agua dulce, oro, diamantes y coltán.

Los asuntos internos de Venezuela tienen interés porque son gigantescos los intereses económicos internacionales y geoestratégicos que están en juego. No más guerras de saqueo. No más sangre por petróleo.

Crisis humanitaria o guerra económico

Los EEUU roban 6.200 millones de euros que pertenecen a empresas públicas Venezolanas. CITGO es una empresa pública petrolífera Venezolana con infraestructura en Estados Unidos que ha sido robada con publicidad e impunidad a la vista de todo el mundo.

Bancos internacionales de pagos retienen ilegalmente 2.217 millones de euros que pertenecen a la República Bolivariana de Venezuela. El Banco de Inglaterra y el Gobierno del Reino Unido ha secuestrado 1.064 millones de dolares en oro que pertenecen al Banco Central de Venezuela.

El sabotaje financiero internacional que ha impedido la entrada de 15.075 millones de euros en divisas…

El bloqueo (de bancos internacionales como Commerzbank, Citibank, Banco Novo Portugal, UBS, Deutsche Bank… por presiones del departamento del Tesoro de los EEUU), el estrangulamiento financiero (de intermediadores internacionales como Euroclear o PNC Bank) y la especulación financiera (de agencias de calificación de riesgo) el perjuicio económico causado al pueblo de Venezuela desde 2013 se calcula en pérdidas por valor de 310.000 millones de euros en producción de bienes y servicios.

El Comité Internacional de la Cruz Roja la ha desautorizado la supuesta ayuda humanitaria, saboteada por los propios golpistas.

La patronal imponte desasbastecimiento y acciones de guerra no convencional como el corte de luz nacional provocado hambre, privaciones, terror y chantaje al pueblo de Venezuela.

Por todo ello, sal a la calle

Concentración Jueves 21 de Marzo a las 19:30 en la Plaza del Carmen

Lola: «No te arrodilles nunca para fregar»

SOBRE EL 8 DE MARZO

¿Qué es el feminismo? Esta pregunta, aparentemente sencilla, es la cuestión más compleja que tenemos que resolver en este momento.

El término <<feminismo>> ha ocupado un mayor espacio en nuestro entorno en los últimos tiempos. Es relativamente fácil oírlo en los medios, en las tertulias televisivas, en las sobremesas con familiares, etc. Si bien es cierto que hay reticencias, en especial, por parte de los sectores políticos más conservadores, a la hora de reivindicarse como feministas, lo cierto es que hay un consenso social según el cual la lucha por los derechos de las mujeres es un espacio que hay que ocupar políticamente. Al fin y al cabo, esto da votos.

No podemos negar que esta es una de las victorias del movimiento feminista. La presencia de este movimiento a través de diversas campañas como el “me too”, “yo sí te creo”, “cuéntalo”, etc. han provocado la conmoción y movilización sociales. Han provocado la visibilización de muchos problemas colectivos que se vivían de forma individual. El éxito, en términos participativos, de la huelga del 8 de marzo del año pasado, ha desencadenado en que, en mayor o menor medida, todos los agentes políticos y, en especial, los partidos hagan bandera de ser “feministas” o de luchar “por la igualdad”. Cada uno a su manera, eso sí. Y precisamente, ese es el problema y la debilidad del actual movimiento feminista. En esta semana me han sorprendido dos titulares: el primero de ellos, anunciaba que la reina Letizia secundaría la huelga del 8M; el segundo, anunciaba el decálogo feminista liberal de Inés Arrimadas. En mi opinión, aquí radica el mayor problema y la mayor debilidad del actual movimiento feminista.

El feminismo, como teoría política, social o económica, no ha sido capaz de generar un núcleo duro de ideas o caracteres que lo definan y que deban ser asumidos por quienes se reivindiquen como tales. Esa es la razón por la cual hoy en día una actuación y la contraria pueden ser calificadas como feministas. Por ejemplo: no sabemos si el hecho de que una mujer venda a un hijo suyo es maternidad subrogada y empoderamiento o si es mercantilización de la vida y favorecimiento de privilegios capitalistas y patriarcales.
En términos económicos esto se entiende muy bien. Sería algo así como si, dentro del marxismo, ante una misma situación, por ejemplo, que un obrero trabaje 14 horas diarias, un sector considerase que es libertad individual y otro sector considerase que es explotación laboral, reivindicándose, ambos, como marxistas.

En mi opinión, este es el problema fundamental del feminismo en la actualidad y corresponde al movimiento feminista solventarlo y responder a las preguntas concretas: “¿puede hacer huelga la reina?” “¿el feminismo liberal es regularizar la prostitución como actividad laboral?” Esto no supone desatender o rechazar la diversidad del feminismo, supone darle forma para crear un núcleo estructural de ideas para avanzar en eliminar las desigualdades a las que se enfrentan diariamente las mujeres.
Por eso, para responder a la pregunta de qué es el feminismo, con ocasión de reivindicar esta idea el próximo 8 de marzo, os traigo la siguiente anécdota.

Lola

La protagonista de nuestra historia es una mujer, de familia obrera, se llama Lola y, desde los siete años, la pusieron a “servir”, es decir, comenzó a trabajar como empleada de hogar. Trabajaba en casa de una familia adinerada, en el centro de Córdoba. Lola ya ha crecido, ya ha tenido hijos y también nietos y nietas. Un día, mientras Lola limpiaba una casa con una de sus nietas, la niña se agachó y, de rodillas en el suelo, comenzó a fregar una bañera. Entonces, Lola le reprochó:

niña, levántate del suelo. No te arrodilles nunca para fregar, si quieren a alguien que se agache, que lo hagan ellas.

La niña no terminó de entender el enfado de su abuela Lola, pero se incorporó y continuó limpiando. Con el tiempo supo que Lola había vivido su infancia, desde los siete años, y toda su adolescencia fregando de rodillas. “Sus señoras” (así es como llamaba Lola a sus jefas), la obligaban a fregar arrodillada. Podían haberle comprado una fregona, tenían dinero suficiente para hacerlo, pero ver a Lola, hija de obreros, con tan solo siete años, fregando de rodillas, formaba parte del ritual clasista y de explotación utilizado por “las señoras” para someter a las hijas del proletariado.

Esta historia real refleja perfectamente lo que es el feminismo. Como teoría política el feminismo parte de la premisa de la desigualdad de la mujer, pero esta desigualdad, no puede desvincularse ni explicarse al margen sistema económico y, si no situamos el eje de clase dentro del feminismo, nunca conseguiremos erradicar la desigualdad estructural de la mujer. Esto no significa que el eje de clase por sí solo explique la desigualdad de las mujeres, pero sin este eje dentro del debate feminista, nunca llegaremos a la raíz o causa última de la discriminación de estas. Por lo tanto, el feminismo, en tanto que teoría emancipadora, nunca podrá ser libertador si no es anticapitalista, ya que el capitalismo es la fuente de todas las desigualdades. El capitalismo cosifica y somete a las mujeres, las controla más allá del propio plusvalor que obtiene de ellas como trabajadoras, ya que, el control del capital sobre la mujer se extiende también a sus propios cuerpos. Partiendo de esta premisa, no podemos admitir que exista el famoso “feminismo liberal” del que algunos se hacen eco en los últimos días. El feminismo, cuyo fin último es erradicar las desigualdades de género, nunca podrá lograr este objetivo sin ser anticapitalista. Hablar de feminismo liberal en los términos hoy expuestos es una contradicción en sí misma. Las mujeres nunca serán hermanas entre sí por el simple hecho de ser mujeres y las nietas de las obreras no vinimos aquí para ser feministas liberales.

Por lo tanto, este 8 de marzo salimos a reivindicarnos como mujeres trabajadoras